Antes de que los negocios declinen irremediablemente, aparecen algunas señales que permiten identificar cuándo una empresa se encuentra en riesgo y necesita implementar estrategias para cambiar de rumbo.
Estos primeros signos pueden ser de dos tipos: por un lado están los financieros, que implican poco control en las finanzas de la organización; y por el otro, los operativos, que afectan la operación y a los colaboradores de la empresa.
Señales de riesgo en las finanzas
Los riesgos financieros son los más llamativos, puesto que son los primeros en aparecer cuando las empresas se dirigen a una crisis:
- Las ventas comienzan a declinar, y no es algo que pase ocasionalmente un mes o dos, sino que llevan varios meses seguidos a la baja.
- Esto influye directamente en el flujo de efectivo, por lo que el pago de proveedores o de algunos préstamos se complica.
- También se vuelve difícil cumplir con todas las obligaciones financieras, como el pago de renta de maquinaria, inmuebles, oficinas o incluso sueldos.
- El margen de ganancia se viene abajo, por lo que la empresa deja de ser redituable.
- Por esa misma razón solicitar nuevos créditos se vuelve complicado o las instituciones financieras comienzan a poner mayores condiciones para otorgarlos, como tasas de interés más altas o cantidades más pequeñas.
- Los inversores tampoco quieren arriesgarse, así que dejan de invertir en la compañía.
Señales operativas que indican que algo está mal
Este tipo de señales no es tan llamativa en un principio, porque muchas de ellas no son tan evidentes hasta que ya se han vuelto un problema:
- Los empleados se encuentran descontentos o les importa poco el rumbo que está tomando la empresa.
- Tampoco hay un compromiso de su parte, se limitan a hacer lo que tienen que hacer para recibir su sueldo, pero sin ir más allá.
- La rotación de personal se incrementa, ya que el descontento de los antiguos empleados permea en los nuevos.
- La comunicación en todos los niveles comienza a fallar, y nadie tiene claro el rumbo que está tomando la organización.
- Con esta falta de motivación y rotación de personal, la calidad de los productos o servicios también declina.
- Incluso en los casos más drásticos comienzan los recortes de personal, ante la insuficiencia de entrada de capital y muchos de ellos ni siquiera planeados, esto solo trae más incertidumbre e insatisfacción al equipo que se queda.
¿Cómo actuar en consecuencia?
Ante las primeras señales que se perciban debe crearse estrategias para contrarrestar sus efectos. Por un lado, si las ventas comienzan a caer, deberán buscarse estrategias para incrementarlas, ya sea a través de nuevos productos o buscar nuevos canales de venta.
Es importante que los colaboradores se sientan parte de la empresa, pues mucho de lo que se haga para aumentar el flujo de efectivo será a través de ellos, ya sea al mejorar la calidad de los servicios o productos que desarrolla la empresa, o en el servicio al cliente que prestan.
En ese sentido, debe trabajarse en ambos frentes al mismo tiempo, es decir, en plantear formas de reducir costos e incrementar las ventas y en mantener una plantilla laboral motivada y comprometida.
Fuentes:
https://www.investopedia.com/articles/financialcareers/07/warning_signs.asp
https://www.entrepreneur.com/article/239730
https://rapseygriffiths.com.au/blog/business-turnaround-10-early-warning-signs/
